por Melisa Giancrisostomo
En plena pandemia, Litoral Gas retiró el medidor del servicio a la institución educativa y un año más tarde debió cerrar el área donde funciona el comedor comunitario por riesgo de derrumbe; lo que generó su traslado a las instalaciones de la escuela especial “Ceferino Namuncurá” para no suspender la asistencia alimentaria que reciben más de 465 niños y niñas.
La directora de educación, Adriana Farroni, confirmó que “las gestiones están avanzadas para que el área de infraestructura escolar levante nuevamente el comedor porque está totalmente destruido” y desde la Municipalidad se está confeccionando el plano de la edificación planificada para recuperar el comedor que cumple una función social muy importante para la ciudad.
Además manifestó que el pasado 22 de diciembre “movieron el expediente” para que la institución pueda resolver el problema del gas natural, logrando recuperar el servicio.
“Al comedor asisten muchos chicos a tener su merienda, su desayuno y su almuerzo. Entones había que tomar las precauciones del caso. Un gran aporte vendrá de la provincia y otro de la municipalidad. Estamos muy contentos porque en unos días más vamos a comenzar con las obras y estamos logrando llevar a cabo todo lo que nos propusimos”.