El gigante brasileño de la carne Marfrig, dueño en Argentina de las marcas de hamburguesas Paty y las salchichas Vieníssima, compró una fábrica de alimentos procesados en China, que sería abastecida parcialmente de carne de Argentina, de Brasil y Uruguay.
La operación, que se concretó a través de su controlada BRF, involucró un desembolso de 80 millones de dólares, de los cuales 43 mill/dol serán destinados a cubrir el costo de las instalaciones y el resto se destinará para hacer adecuaciones en la planta e instalar dos líneas de producción de hamburguesas.
La operación de Marfrig en Argentina incluye la producción y venta de alimentos derivados de carne bovina y procesados en el país. Cuenta con 5 plantas productivas, con capacidad de más de 40.000 toneladas de hamburguesas por año y más de 30.000 de otros productos.
“Esta adquisición representa un hito significativo para BRF y Marfrig. Al integrar esta planta a nuestras operaciones, no solo ampliamos nuestra capacidad de producción en ese mercado, sino que también es una mayor oportunidad para exportar materias primas desde nuestras unidades de Brasil, Argentina y Uruguay”, expresó Gustavo Kahl, CEO de Marfrig Argentina.
BRF es también una de las mayores empresas de alimentos del mundo. Tiene en su portafolio marcas como Sadia, Perdigão y Qualy. Estuvo presente en el mercado de Argentina hasta 2018, cuando vendió a Marfrig la operación de Quickfood, el fabricante de Paty.
Con esta transacción Marfrig contará por primera vez con una operación industrial en el mercado chino, donde ya comercializa proteínas animales. La previsión es que la nueva unidad esté operando bajo la gestión de BRF en el primer trimestre del año próximo.
Construida en 2013, la planta posee dos líneas de procesamiento de alimentos, con una capacidad actual de aproximadamente 30.000 toneladas al año y potencial para expandirse.
La planta está ubicada en Henan, una provincia del Valle del Río Amarillo, en la región central de China, conocida como el lugar de origen de la civilización China. Se trata de la tercera zona más poblada de China, con alrededor de 100 millones de habitantes.
Según estimó BRF, esta operación generará alrededor de 850 nuevos empleos y una capacidad adicional de aproximadamente 30.000 toneladas por año, duplicando la capacidad de la planta para alcanzar las 60 mil toneladas al año.
“La adquisición de esta planta está alineada con la estrategia de ampliar la presencia global de la compañía mediante la diversificación de sus operaciones y fortaleciendo la competitividad de BRF, junto con el incremento en la oferta de productos de valor agregado”, informó la compañía brasileña.
La expectativa de la empresa es que esta inversión represente una oportunidad para expandir la base de clientes e impulsar las ventas de la compañía.
Además, la creación de un “hub” de exportación en esta nueva ubicación abre oportunidades para atender mercados internacionales de manera más eficiente, optimizando la logística y facilitando la distribución hacia otros países, añadió.