En la sesión del Concejo Municipal de Arroyo Seco, se aprobó por mayoría el convenio firmado entre la Municipalidad y la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo de Santa Fe para la escrituración de las viviendas del Barrio Asunción, etapa 1. El acuerdo, registrado como contrato 671/2024, establece la regularización del plan número 9108, que incluye 56 viviendas y 4 lotes, con un costo total de $23.504.127,14.
La deuda será abonada por la Municipalidad en 240 cuotas iguales, mensuales y consecutivas, con garantía respaldada por la coparticipación de impuestos. Este paso es clave para brindar seguridad jurídica a las familias beneficiarias, quienes finalmente podrán obtener las escrituras definitivas de sus hogares.
El voto en contra de Coradini
Aunque la medida fue aprobada con cinco votos a favor de los concejales Miguel Stéfano, Damián Salinas, José Luis Murina, Matías Attoresi y Sebastián Ghione, el concejal Miguel Ángel Coradini votó en contra y explicó su postura.
“Estoy de acuerdo en que se debe regularizar el barrio, pero considero inaceptable que la deuda recaiga en la Municipalidad, cuando esta problemática se originó por la falta de control de la Provincia. Ahora se busca que los fondos municipales, que pertenecen a todos los ciudadanos, sean utilizados para cubrir una deuda específica de un sector”, afirmó Coradini.
El concejal también criticó la negligencia histórica de la Provincia en la administración del barrio, señalando que “fue lamentable lo que pasó con ese barrio. No se controló nunca, y ahora quieren que lo pague Arroyo Seco. Es una desubicación total”.
A pesar de las críticas, el convenio fue refrendado por el Concejo Municipal como un paso necesario para regularizar la situación de los vecinos del Barrio Asunción. Desde la gestión local destacan que este avance permitirá resolver una deuda histórica y brindar una solución definitiva a las familias que habitan en el lugar.
El director de Hábitat municipal viajó a Rosario para completar la firma del convenio y dar inicio formal al proceso de escrituración, marcando un avance significativo en la regularización dominial del barrio.