La Municipalidad de Arroyo Seco ha intensificado las acciones para prevenir la proliferación del dengue, sumándose al programa interministerial "Objetivo Dengue", lanzado por el gobernador Maximiliano Pullaro. Este programa destina $8.000 millones y promueve el trabajo coordinado entre áreas como Obras Públicas, Educación y Salud para evitar que el mosquito Aedes aegypti encuentre condiciones propicias para reproducirse.
El secretario de Salud, Mariano Athies, destacó que la iniciativa incluye la vacunación del personal de salud como medida preventiva. “Estamos vacunando progresivamente. Primero abarcamos al grupo de 15 a 39 años, luego ampliamos hasta los 50, y ahora relevamos a personas con factores de riesgo, especialmente aquellas que ya tuvieron dengue”, explicó el funcionario.
Además, remarcó que en Arroyo Seco no se han registrado casos de dengue en lo que va del año, aunque subrayó que la región ya enfrenta casos en el norte de Santa Fe y en grandes urbes como Rosario.
El secretario de Salud, Mariano Athies, destacó que en Arroyo Seco no se han registrado casos en lo que va del año, pero alertó que se espera un incremento significativo en toda la región. “Estimamos que los casos podrían duplicarse respecto al año pasado, cuando registramos entre 600 y 800 casos, aunque sabemos que hay un subregistro proveniente del sistema privado”, señaló.
Carina Gres, Directora General de Servicios de Salud y Acción Social, explicó que junto a especialistas como las ingenieras Ximena Del Cerro y Eliana Bellandi, se desarrollaron talleres en instituciones educativas. “La finalidad es que los chicos sean replicadores en sus hogares. Aprenden a identificar síntomas, a prevenir criaderos de mosquitos ya usar repelentes correctamente”, detalló.
En los últimos meses, se trabajó en las escuelas primarias y secundarias de la ciudad, incluyendo actividades en la Escuela Santa María Goretti y la Escuela Comercial. Aunque el ciclo escolar está por terminar, la estrategia preventiva continuará con operativos de descacharrado en los barrios mapeados como de mayor riesgo.
La planificación incluye un trabajo intensivo en descacharrado durante al menos un mes antes de que inicie la temporada alta de casos. Carina Gres también destacó la importancia de las acciones de bloqueo cuando se detecta un caso: “Se limpia y fumiga la vivienda del paciente y nueve manzanas a la redonda, además de buscar posibles febriles en la zona”.
No obstante, ambos funcionarios enfatizaron que la fumigación, aunque necesaria en algunos casos, no es la solución más efectiva. “El mosquito del dengue vive en los hogares. Por eso es clave que los vecinos revisan sus patios, eliminan recipientes con agua acumulada y cepillar los recipientes de mascotas y plantas”, recomendó Carina Gres.
Para mejorar el seguimiento de los casos, se implementará un sistema de registro que unificará datos de laboratorios, clínicas privadas y centros de salud públicos. Este sistema permitirá monitorear a los pacientes cada 48 horas, garantizando su hidratación y brindando pautas de alarma.
Ambos funcionarios hicieron un llamado a la comunidad para asumir la responsabilidad individual en la lucha contra el dengue. “No hay sistema estatal que pueda reemplazar el compromiso ciudadano en la prevención”, concluyó Carina Gres.