
El menor iba a bordo de una motocicleta de 150 c.c. marca Motomel sin chapa patente y a toda velocidad por calle Galvez, cuando la policía lo interceptó en un patrullaje de rutina y le hizo señas para que se detenga. Como huyó, se inició una persecución que terminó con el secuestro del vehículo.
Según informó la policía, al darle la voz de alto mediante señalizaciones de sirenas el chico hizo caso omiso a las órdenes impartidas, acelerando más aún el rodado y emprendiendo su huida por varias arterias de la ciudad.
Sin perderlo de vista los policías informaron vía radial a la central de emergencias 911, hasta que en un momento derrapa y pierde el control del vehículo logrando detener su marcha. Allí se pudo proceder a su identificación, comprobando su edad y secuestrando el vehículo.