Juan Borus, referente del Instituto Nacional del Agua, alertó en Primera Plana por Cadena 3 Rosario, sobre la situación crítica del río Paraná y su impacto en la actividad portuaria y agrícola de la región.
A pesar de la expectativa de una regularización en el régimen de lluvias, advirtió que esto no se traducirá necesariamente en una mejora del nivel del Paraná, al explicar que el nivel del río ha descendido de manera significativa, afectando el calado de los buques que cargan en el puerto de Rosario. "El descenso de más de 3 metros en 60 días en el nivel del Río Paraná no se observaba desde 1969".
Este descenso complica la logística portuaria, ya que los buques deben salir con menos carga de la prevista, lo que afecta la operatividad y la economía regional.
"Está clarísimo que estamos ante sorpresa tras sorpresa. Se supone que un sistema de alerta tiene que asegurar que el usuario de la información no tenga sorpresas, pero la naturaleza, alterada o no alterada, nos está llamando permanentemente la atención ", comentó Borus, refiriéndose a la imprevisibilidad de los fenómenos climáticos y su impacto en la actividad.
El cambio climático, según Borus, está teniendo un impacto cada vez más evidente en el clima regional, manifestándose en fenómenos como el descenso histórico del nivel del Paraná.
"Es señal de que la variabilidad climática regional está muy potenciada, muy dinámica, sumamente dinámica, más de lo que era, por decir algo, 20 años atrás, muy claro", comentó.